Thursday, January 31, 2008

EL ESPORTON
ENTRE DOS AGUAS
Una de las cosas hermosas que tienen los toros es ver la plaza colmada de público. La plaza llena, es la vida en acción, bulliciosa, tumultuosa, variante, caprichosa, infantil, irreflexiva, exigente, justa e injusta. La plaza llena es el ritmo y el latido, ritmo en el torero y latido en el toro.
Toro y torero, son el porqué de una sensación cruel, generosa y feroz que se llama público, capaz de mimar y besar, así como de maltratar y destrozar. Dispuesto para el trance y el triunfo. Nada hay tan tremendo como la plebe, como la masa donde miles de cabezas y manos acechan para dar rienda suelta a sus emociones. Es el enemigo en potencia con el que ha de luchar el torero, desde que despliega su capote de brega y el clarín anuncia la salida del toro. Al luchar con el toro, enemigo más claro, el torero lucha indirectamente con el otro enemigo que tiene a su espalda. El animal con sus reacciones, resabios o bravura, es menos peligroso que la presión mental de la masa, que sin darse cuenta el torero gravita sobre él, concentrada en una mente colectiva, vigilante e insidiosa; cerebros expectantes de los movimientos de sus manos, de sus pies, de la posición de la muleta, del vuelo del capote o de la gallardía en la estocada. El torero por tanto arriesga su vida ante el toro, y el prestigio su vida profesional ante el público. “Admira el publico viendo con ansiedad los equilibrios del funambulista en el alambre”. El torero por tanto en su equilibrio entre el publico y el toro es un héroe cundo vence y convence al publico, que responde enardecido en la ovación. Pero “ay de él si fracasa”, se le gritara, insultara y su despedida será entre almohadillas. Y en ello estriba la grandeza del toreo. Cierto que; hablo cuando el publico demandaba rigor y exigencia y mucha seriedad, capaz de entregarse por entero cuando, el valor y las faenas sobresalían por encima de lo normal. Y también muy capaz de cuando se sentía engañado, por la desidia, la torpeza o la desgana. ¡El de “oro” debía apretarse los machos!... Y correr…

Fermín González.-

Thursday, January 24, 2008

EL ESPORTON
ORO Y TORO

En el toreo, no es todo oro lo que reluce: No se trata de disminuir el toreo, ni desestimar la elegancia de sus figuras, ni poner en duda la seducción capital de sus gracias, así como tampoco ver en el mismo, un arte esencialmente plástico. Si este fuera el caso, se le podría separar del soporte del animal y llevarlo a cualquier otro escenario... Y es que, un torero sin toro, queda reducido a muy poquita cosa.
El toreo es – no lo olviden nunca -. Un inteligente desafío arrojado al drama, la angustia, al miedo y la incertidumbre. La inigualable belleza que de el se desprende, saca toda su fuerza de la realidad de la victoria conseguida por el hombre. En cuanto se reduce el peligro, o no existe más que como mere ficción, esta sensación se marchita y pierde toda su originalidad. El toro, es el único que puede convertir un hecho banal en dramático. Cuando la lucha con el toro es un espectáculo mayor, una de las obligaciones esenciales del torero es, la de emocionar al público y, conseguir con la expresión de su arte mover directamente sus sentimientos, sus corazones y sensibilidades. Es decir hacerlo vibrar, ponerle los “pelos de punta”, arrancarle el olé seco y rotundo, que no puede reprimir su garganta.- Claro; el toro debe estar en la arena -.
Para torear bien, se debe exponer, y aun más en momentos cruciales, en los que el torero pone en juego todo su esfuerzo y capacidad personal; aguantando toros de largo y veloces en el envite, en los primeros pases de capa, conduciendo y dominando al animal, en la ejecución y cite, en la estocada etcétera. Esto, si es el riesgo que debe ser calculado, es el gesto y el rigor expuesto en torería lo que crea tensión. Y esto no escapa al buen aficionado que, aunque en minoría aun se encuentra entre el publico, y que no se deja burlar por esas demostraciones de desplantes y desafíos de aire teatral, que crea una atmósfera cursi, de desorbitado triunfalismo. El verdadero arte, esta en expresar serenidad, el perfecto dominio de si mismo y las circunstancias de la lidia. – Que raro…


Fermín González.-

Thursday, January 10, 2008

EL ESPORTON
EL TOREO INOLVIDABLE
Dentro de la caudalosa vida taurina: parece ser que, después de establecerse la época de oro con Joselito y Belmonte, el toreo según (magníficos oradores), comienza a ser moderno cuando aparecen en escena los Bienvenida, Ordoñez, Aparició etcétera. Y sinceramente, no acierto a comprender (establecidas las distancias en uno y otro orden) como tendríamos que situar el toreo de hoy. Donde en contadas ocasiones, y contados coletudos, el resto, es decir, la gran mayoría del escalafón; se aplican y se apoyan más en ese toreo sucedáneo, mentiroso y ventajista que, cansados estamos de presenciar en nuestras plazas. ¿Será supermoderno, será “guay?” – Cualquiera sabe -.
Si recapitulamos sobre la trilogía – parar, templar y mandar -.. Por el temple, se manda; por el mando, es posible no moverse. Si somos capaces de observar esto una tarde (aparte del milagro) veremos como surge sencilla y fluidamente el quehacer del torero, que realiza un torero en perfecta concordancia, con la característica esencial de tener delante a un toro bravo – claro esta -. Luego eso – y nada más que eso, es lo único que se puede llamar toreo, que se nos revela desde aquella época de oro, o si se quiere desde esa otra más “moderna” o cercana. No voy a caer en la tentación de entrar en disquisiciones o comparaciones, pues en la historia del toreo, han existido toreros de toda índole y condiciones. Pero, también es bien cierto, que estamos en una época donde la mediocridad y el adocenamiento masivo, es tarjeta habitual de presentación
Hay unas normas toreras, que por el contrario – no son planchas de grabar el mismo dibujo –, sino brújulas orientadoras de muchos caminos, de muchas líneas – unidas en la variedad – por donde el toreo debe discurrir. El toreo es sencillamente toreo, a secas. Ante el toro en edad, trapío y los otros atributos del toro de lidia. Ellos los toros, son los que ponen y quitan etiquetas. ¡Donde estarán, los animales!...


Fermín González

Thursday, January 03, 2008

CERTAMEN TAURINO DE LEDESMA IV- EDICION

ARRANCA DE NUEVO ESTE CERTAMEN TAURINO POR CUARTO AÑO CONSECUTIVO. EN UN PRIMCIPIO SE REUNIO LA COMISION ORGANIZADORA CON EL FIN DE IR ELABORANDO FECHAS, ASI COMO EL CONTACTO CON GANADEROS QUE CEDAN SUS RESES PARA EL EVENTO, Y OTRAS CONSIDERACIONES.

CONCLUSIONES PRIMERAS: CONCURSO PARA JOVENES QUE NO HAYAN DEBUTADO CON CABALLOS, Y CUYA EDAD ESTE COMPRENDIDA DESDE LOS 16 AÑOS HASTA 19. EL NÚMERO DE ADMITIDOS SERA AL IGUAL QUE EN FORMATOS ANTERIORES DE 24 CONCURSANTES, DISTRIBUIDOS EN CUATRO PRUEBAS Y UNA FINAL.

PARTICIPARAN TANTO DE LA ESCUELA DE SALAMANCA – EN MAYOR NÚMERO – Y, ESCUELAS INVITADAS, ASI COMO LOS QUE ACTUEN POR LIBRE. ESTOS ULTIMOS DEBERAN CURSAR DOCUMENTACION, CURRICULUM, Y TELEFONO DE CONTACTO AL AYUNTAMIENTO DE LEDESMA (SALAMANCA), DONDE SERAN ADMITIDAS HASTA EL DIA 10 DE FEBRERO- PROCEDIENDOSE POR LA ORGANIZACIÓN EL NUMERO DE ELLOS QUE SE DISPONGA.

CONCLUIDA ESTA SELECCIÓN SE ELABORARA UN CALENDARIO DE ACTUACIONES Y SE FIJARAN LAS GANADERIAS PARA CADA FECHA DEL EVENTO, QUE TIENE PREVISTO COMENZAR EN LAS FECHAS 2 DE MARZO- 9 DE MARZO- 16 DE MARZO- 23 MARZO Y FINAL EL 30 DE MARZO, (SALVO CONTRATIEMPOS QUE IMPIDAN LA CELEBRACION DE ALGUNA PRUEBA).

EN PROXIMAS FECHAS SE DARA A CONOCER A LOS MEDIOS, LAS GANADERIAS PARTICIPANTES, Y LOS DIAS DE SU PARTICIPACIÓN, ASÍ COMO CUALQUIER NOVEDAD QUE INTRODUZCA LA COMISION ORGANIZADORA.



Informo Fermín González.- (saludos y gracias por vuestra colaboración)



Nota- RUEGO A LOS COMPAÑEROS QUE COLABORAN, EN PORTALES TAURINOS DE INTERNET, PUBLIQUEN EN SUS PAGINAS ESTE CONCURSO.-

Tuesday, January 01, 2008

EL ESPORTON
VIEJO NOVILLERO
¡”Como te encuentras Toreri”!. Cansado, amigo muy cansado-. Esperando que el de “Arriba” me iguale, p á, colocarme la estocada -, no podía ser de otra manera su respuesta- con humor y con ironía taurina -. Se apago la vida del viejo torero. Se consumió la vida de este singular personaje, que vio el paso de la historia y épocas, de la tauromaquia con inusitada ilusión y con desmedida afición. La suya fue una historia sin alternativas, sin lujos de luces, sin testigos y padrinos. La suya fue una vida llena de avatares, entre la supervivencia y su gran afición al toro. La divisa de su generación, no tuvo más salida, que mirar la vida con los ojos teñidos de niebla, y “jugar” al toro, vistiendo trajes con alamares rancios y apagados. Aún así el viejo torero, nos contaba una y otra vez, un millón de nostalgias de los ruedos, lo hacia con vehemencia, exultante a borbotones, pero también, con humildad, lección que no pocos de los que recibieron su consejo deberían olvidar.
Es la historia de un desheredado del ruedo, de un romántico, que hubo de lidiar una guerra, y lo que detrás vino, bregar con una vida y andar los caminos polvorientos, buscando un pitón, sintiendo la emoción, de que rozara sus carnes y hacer aquel toreo que llevaba dentro, unido a sus pensamientos y a sus sueños, con aquellos toros de aviesas intenciones, duros de patas y negros como la tristeza. Este viejo torero, como tantos oros viejos toreros, fueron siempre los de mayor ilusión, mayor rigor y mayor afición han desplegado por las misteriosas arenas del ruedo y, por los burladeros del miedo. Han sido ellos quienes todo lo han añorado, quienes han toreado cada noche al toro que se entrega. Esta, es la historia de nuestro Toreri, es la historia de un bastón y una gorrilla, que se han dejado notar en el piso de muchas plazas de pueblo. Termino la historia de una afición vivida desde dentro del corazón, sintiendo con humildad el amor desmedido por esta Fiesta por un hombre, un viejo novillero hecho de porcelana y duro acero. Que Dios te bendiga –Dionisio Rodríguez.-Toreri.


Fermín González.-