Saturday, March 28, 2009

HEGEMONÍA - PONCE





"Ponce-ficado"el escalafon:”El Ponce-ficador” llego de las tierras americanas, desembarco en su tierra valenciana, y en la misma dio una vez más a conocer el porqué de semejante apelativo. Porque; la verdad taurina de los últimos años es que Ponce es la máxima figura del escalafón. Ahí lleva impertérrito rozando los veinte años de alternativa. Toreando, donde y cuando quiere, cobrando más que nadie, y teniendo aún a estas alturas de su carrera un perfil serio, que le ha dado más seriedad a su toreo si cabe. Y lo más importante; sacando partido a todos los toros, tanto al bravo, parado, manso. Toros, a los que, con tremenda facilidad en unos y otros terrenos, con relajación y empaque, le lucen primorosas las faenas. ¿Qué más se puede pedir de un torero para formar parte del catalogo de figura?
Enrique Ponce, en este año taurino 2009 continúa su hegemonía, y ha comenzado demoledor, intratable, insultante, lleno de majestuosidad, naturalidad y ambición licita, para salir ya; de ganador en los albores de temporada. Y parece querer demostrar a propios y extraños, la verdad de su entrega y su desmedida afición, que en mi opinión es una de las grandes cualidades que han avalado su trayectoria, aparte de ser un torero desprendido de arrogancia, que respeto a los públicos, incluso cuando fallo en alguna ocasión. El maestro fallero, lo ha ganado todo, apenas se ha dado tregua, y, ha arrasado de la A, a la Z cual río desbordado arrasa cuanto encuentra a su paso. Dentro del palenque de las plazas, no ha perdonado a sus más directos rivales, se ha crecido ante las adversidades, y algo muy importante, fiel a si mismo, no se ha escondido, no se ha tapado para salvarse de la crítica y de los públicos exigentes.

(“Alguien podrá creerme forofo del torero, o miembro de su peña por manifestarme con tal vehemencia”) - ni lo uno, ni lo otro -.Pero estaría ciego el no reconocer, cuando un torero esta en su momento dulce y cumbre, que se entrega, que busca e intenta acercarse a la utópica perfección. Su toreo tiene limitaciones al ejecutar las suertes, pero esa afición desbordante, hace surgir un toreo que emerge largo, poderoso, desmayado, y prolongado remate. De continuar en esta línea, de mantenerse algún año mas, seguro, queramos o no reconocerlo, pasara a ser un torero de época, uno de los elegidos para formar parte de la historia del toreo de hoy. Porque hoy donde priva la vulgaridad. Enrique Ponce con su sabiduria, ha dispuesto que se bifurquen los caminos, uno para él, otro para el resto.


Fermín González.-

0 Comments:

Post a Comment

<< Home