Thursday, November 29, 2007

EL ESPORTON

BUENA VARA


¿Porque los picadores van sin su vara en el paseíllo? Se me dirá, que otros avanzan también sin los rehiletes, sin la espada, tan solo con el inútil capote de lujo. Pero no es lo mismo… ¡Un picador sin el palo es una figura incompleta descabalada, falto de equilibrio semejante al funámbulo que cruza la maroma!... ¡Lo que confiere aire marchoso a la silueta del picador, es precisamente su pica!.- Los piqueros, que durante mucho tiempo figuraron en primer lugar de los carteles, como homenaje de caballeros que cabalgan por las arenas taurinas y romances del pasado -, van desprovistos de su arma ofensiva y defensiva, puede notarse que estos parecen inquietos, como avergonzados, agarrados solo a la rienda clavando espuelas en los ijares de sus pesados caballos, deseando terminar el ritual del paseíllo.
En el patio de caballos, yacen las picas, que previamente marcaron sus dueños con sus nombres, unos y otros prueban sus cabalgaduras, educándoles y conduciéndoles a avanzar y retroceder, porqué ser picador es torear a caballo dentro del estrecho límite que la corrida moderna deja a esa suerte. Puesto ya, en el palenque de la plaza, ha de apreciar la fuerza del adversario, su arrancada, su temperamento y codicia, sus tendencias particulares, a fin de picarlo correctamente. “Choca el cuerno del toro contra el hierro de la “mona”, a veces abierta la calzona, observamos el pedazo de armadura, lo cual, nos da la sensación de torneo medieval, campanea, resuena el estribo con estrépito, cual si fueran cantaros, de aquel antiguo repartidor de leche, vemos también como saltan dijones de lana del colchón del peto.” - Pero todo se apaga con la algarabía, porque el montado, excita las iras del publico, pues, se excede en el castigo, se pica trasero, se barrena, o se recarga en la suerte etcétera. Y esto mueve a soportar insultos feroces, terribles dicterios y aullidos contra su gesto y falta de pulso, que los picadores, ni siquiera oyen, como no sea, al terminar el tercio y recorrer el anillo para salir de la plaza. “Alguna ovación también hemos oído…Pocas claro…”

Fermín González

Monday, November 19, 2007

EL ESPORTON
PUESTA A PUNTO
El toreo de invierno en la España taurina, esta supeditado al entreno, ha hacer campo, al descanso, a ponerse fuerte para cuando se inicie la temporada. Es una máxima que año tras año todo torero tiene bien aprendida.
Antes de que dicha temporada comience a rodar es muy frecuente, que entre los personajes más próximos a los toreros, entre los que se encuentran, aquellos “alcahuetes” de tentadero, que “(Móvil)” en ristre, suelen intercambiarse la información que tiene como base; la pregunta “¡como esta fulano…!” obteniendo una respuesta, que no será del todo sincera, dependiendo de los intereses que persiga el intermediario y seguro conocido taurino.
Pues bien, si los toreros se ponen a punto, ocurre al igual con los toros. Los empresarios, sobre todo los más fuertes, los que dominan el conglomerado taurino, comienzan a mandar a sus emisarios y veedores a recorrer ganaderías para adquirir aquello que más y mejor se acomode tanto en precios como en hechuras, de lo que van a soltar por toriles cuando comience a sonar el clarín.
Toros, que ahora aún no están rematados, no tienen buen lustre, no están cumplidos, en definitiva, no están puestos, van siendo señalados, anotados sus números, para cuando en los meses del recorrido ferial se encuentren en su punto de presentación, trapío, desarrollo, peso etc. etc. O sea, dispuesto a ser el “Rey” de la Fiesta. Pero todos sabemos que esto no será así (se admiten excepciones), y a ese ejemplar, al toro llegado a su máxima esplendidez, le espera una tortuosa, denigrante y estresante manipulación, Todo estará en su contra, para convertirlo si es posible en el “becerro de oro”. Como digo estas son las fechas, de sosiego y descanso para unos, sin embargo, otros no paran, no cierran nunca sus despachos, hay que comprar, señalar ganado y contratar al torero lo antes posible, e ir cerrando ferias y festejos, con el fin de apañar las exclusivas, sobre todo de aquellos que dominan el escalafón. Otros por el contrario, comienzan su particular peregrinaje, buscando la recomendación para estar en el cartel. Nada nuevo por otro lado, Cada año sucede, más de lo mismo.

Fermín González

Thursday, November 15, 2007

EL ESPORTON
TIENTA

En prácticamente todas las ganaderías de bravo, han comenzado herraderos y tientas, esas labores primitivas, que como bien saben consisten en primer lugar, grabar con hierro y fuego números y marca de la casa que, distinguirá al animal mientras viva. Hembras y machos tendrán nombre en un bautismo de dolor imprescindible.
La tienta es la prueba o ensayo, a la que anualmente se somete a las vacas jóvenes, para poder juzgar, casta, nobleza, resistencia o mansedumbre etcétera, con el fin de destinarlas a la reproducción. Del test de selección que haga el ganadero, salen los productos que años después veremos en las plazas -. ¡Y, esa es la cuestión!. Porqué según que ganaderos, su forma y criterios de entender el proceso de selección, sus exigencias, sus asesores, sus caprichos incluso, su tozudez u otros intereses, pueden llevarle a dejar en su finca, lo menos granado e interesante que esa seleccionada vaca puede parir.- Tengo entendido, que años atrás, se enviaban al matadero hasta el 60% de animales probados; hoy no se consiente sacrificar más del 10%. ¿Qué ocurre?, Pues que vale casi todo, y que un gran porcentaje (salvo excepciones, que las hay) se selecciona y se escoge al revés. La vaca que repite, tiene picante, esta encastada y aprieta, se va al matadero. Porque hoy la vaca debe hacer otras cosas, ha de ser suave, dulce, buena para el torero, con poca fiereza y genio, para que sus días no estén contados, sobre todo si en la ganadería, tienta la figura de turno.
-Para muchos estaré equivocado, al exponer tales argumentos; y es posible que así sea -. Pero, puede decirme alguien. ¿Quién ha hecho los toros que hoy se lidian? ¿Quién ha parido al toro sin movilidad, sin resuello, domesticado, descastado, triste y sin emoción?. No pocos ganaderos han advertido de este peligro, será dificil retornar a los orígenes más puros. Otros seguirán pasando por el rodillo abusivo para satisfacer intereses comerciales de “taurinos” y virtuosas figuras, que quieren hacer o han hecho ya, una fiesta a su antojo.-

Fermín González.-
EL ESPORTON
EL QUITE

Las competencias en los toros, han sido el alma y el nervio de la Fiesta. A ellas se le deben los cambios más radicales, los avances más considerables y los momentos más gloriosos y felices del toreo. Preguntar a cualquier “viejo” aficionado o buscar en la historia y, tanto la referencia verbal como escrita, os dirán que las mejores tardes de toros, nacieron al calor de una competencia. Competencia, que ha llenado los mejores periodos de la fiesta, dejando en su historia un surco hondo y profundo.
Como las suertes del toreo se van diluyendo. No queda más remedio que, resucitar algunas, aunque solo sea para recordar que existieron, porque salvo “milagro”, no volveremos a verlas. Entre estas, podemos hablar de la noción olvidada del quite, más que olvidada, hasta desconocida por las generaciones modernas. El quite se definió (como la acción de apartarse al toro del lugar donde puede haber riesgo de cogida). Hubo, también un tiempo en que se rivalizaba en los quites, era cuando se picaba a los toros con verdad y justeza, los toros eran quitados con prontitud por el matador de turno y, este esmeraba su torería y guapeza. – Que rematando su serie se iba con torería hacia la barrera, donde titular y el de turno cruzaban retadora la mirada, buscando su respuesta, lo que en ocasiones ocurría, en beneficio de la afición que, disfrutaba del competitivo repertorio de capa -. Hoy, el quite como tal, salvo alguna honrosa excepción ha desaparecido. Venida a menos la suerte de varas y siendo poco frecuente que los toros derriben y pongan en peligro al picador, el quite ha quedado convertido en una serie de lances preparados, que poco o muy poco, tienen que ver con la esencia verdadera que representaba la suerte. De otra parte, como el toreo se ha acortado hasta lo inverosímil, ya no alcanza la estimación que se concedía antes al torero (“estar bien colocado”). Lidiar, no es solo ya lo de menos, sino que el vocablo se emplea con sentido despectivo. Y en lidiar, esta la verdadera raíz del toreo.-

Fermín González.-

Thursday, November 01, 2007

EL ESPORTON
PLAZAS SIN VIDA
Prácticamente cerradas, todas las plazas de toros. La campaña taurina termino en España y muchos de nuestros matadores marcharan, allende los mares para proseguir toreando en las plazas de las ferias Americanas, compartiendo cartel con aquellos toreros y estoqueando toros nativos de aquellas tierras lejanas de habla hispana. Se trata de ferias cortas, donde realmente, salvo algunas plazas de relieve como la del toreo en México, no cabe esperar novedad importante, ya que los carteles se forman con diestros ya valorizados, que alternan con toreros de aquellas tierras, donde algunos adquirieron más o menos nombradía en los ruedos españoles.
Aquí; pondremos epilogo al año taurino - como no - haciendo un balance del mismo. Los más Iluminados y eruditos de nuestros informadores, aquellos de constante peregrinar por todas las ferias, nos relataran cuanto ocurrió y sobresalió en este fin de curso taurino. Al mismo tiempo, muy sutilmente para no herir nuestra sensibilidad, nos irán preparando el cuerpo para el año próximo.
Comienza el paron taurino, propio de la estación invernal. Son fechas en las que dan comienzo las tareas propias del campo, tanto herraderos, como tientas están en todo su apogeo en las fincas. Todos nos apartamos un poco del mundillo alborotador, que traen consigo las ferias. Así, ahora también nos ocuparemos de repartir los premios de la campaña torera, en uno y otro punto del territorio ferial taurino
Pocas, muy pocas cosas cambian en este conglomerado taurino, donde los comentarios que tienen algún saliente son de poca monta, de pequeño vuelo, de conjeturas, de baja responsabilidad y trascendencia, donde se ponen de manifiesto todos nuestros desencantos, el ninguneo, el ya lo dije yo, y otros etcéteras del mismo estilo. Este paréntesis de la actividad taurina, propio de la estación invernal, (que se nos antoja más que prolongada, sobre todo por estas tierras) - Se dice, que es tiempo de reflexión, de poner orden, sosiego, descanso y recogimiento, de vivir y respirar sin la incertidumbre de la espera. ¿Y será verdad?

Fermín González.-
EL ESPORTON
ATRAPADO
El aficionado taurino tiene capacidad fabulosa para la espera resignada: Protesta, se encoleriza, reniega con la boca pequeña de su afición, tiene por firme su propósito de no volver a presenciar una corrida de toros, y, da al olvido enfados y propósitos tan pronto ve de nuevo un cartel.- Ocurrió así antes, - en muchas ocasiones sucede así ahora. De lo que ya no estoy tan seguro es, ¡ seguirá así mañana!. Me estoy refiriendo al aficionado, no al publico en general, al cual le atraen otras motivaciones algo más alejadas de las intimas emociones que busca el aficionado “feten”.
Sin embargo, hay muchas maneras de admirar y hasta de sentir afición por el arte taurino. No todo es saber de toros, ni estar al tanto de la brillante terminología con que los eruditos en materia de la lidia designan cada uno de los movimientos que toro y torero ejercitan en el ruedo. La ligereza de un arte atrevido, la inteligencia y el valor de un hombre, se convinan perfectamente con la fuerza y el instinto poderoso del animal en la dorada arena de la plaza, para que brote el aplauso y el grito de emoción del profano en tauromaquia.
Son muchos aficionados, que confiesan no entender de toros y, sin embargo les gustan. Es el conjunto humano y su estampa lo que les atrae del espectáculo taurino; un hombre joven que, vestido de luces juega con la muerte ante una fiera brava. El relumbrar de su indumentaria, la fama, el valor, el ambiente dentro y fuera de la plaza, todo en el son motivos poderosos de atracción. Cuanto se desarrolla en el ruedo tiene para el aficionado menos avezado una portentosa sugestión, si el toro y el matador son valientes, puede el interes sentido por una corrida llegar a convertirse en frenesí y entusiasmo. Es ese noble aficionado que se obliga con franqueza a reconocer que, no entiende de toros, que no distingue el pase natural de otro cualquiera, porque todos le parecen naturales. Es ese aficionado fiel, símbolo del colorido que también requiere una corrida de toros.

Fermín González.-
EL ESPORTON
TIENTA

En prácticamente todas las ganaderías de bravo, han comenzado herraderos y tientas, esas labores primitivas, que como bien saben consisten en primer lugar, grabar con hierro y fuego números y marca de la casa que, distinguirá al animal mientras viva. Hembras y machos tendrán nombre en un bautismo de dolor imprescindible.
La tienta es la prueba o ensayo, a la que anualmente se somete a las vacas jóvenes, para poder juzgar, casta, nobleza, resistencia o mansedumbre etcétera, con el fin de destinarlas a la reproducción. Del test de selección que haga el ganadero, salen los productos que años después veremos en las plazas -. ¡Y, esa es la cuestión!. Porqué según que ganaderos, su forma y criterios de entender el proceso de selección, sus exigencias, sus asesores, sus caprichos incluso, su tozudez u otros intereses, pueden llevarle a dejar en su finca, lo menos granado e interesante que esa seleccionada vaca puede parir.- Tengo entendido, que años atrás, se enviaban al matadero hasta el 60% de animales probados; hoy no se consiente sacrificar más del 10%. ¿Qué ocurre?, Pues que vale casi todo, y que un gran porcentaje (salvo excepciones, que las hay) se selecciona y se escoge al revés. La vaca que repite, tiene picante, esta encastada y aprieta, se va al matadero. Porque hoy la vaca debe hacer otras cosas, ha de ser suave, dulce, buena para el torero, con poca fiereza y genio, para que sus días no estén contados, sobre todo si en la ganadería, tienta la figura de turno.
-Para muchos estaré equivocado, al exponer tales argumentos; y es posible que así sea -. Pero, puede decirme alguien. ¿Quién ha hecho los toros que hoy se lidian? ¿Quién ha parido al toro sin movilidad, sin resuello, domesticado, descastado, triste y sin emoción?. No pocos ganaderos han advertido de este peligro, será dificil retornar a los orígenes más puros. Otros seguirán pasando por el rodillo abusivo para satisfacer intereses comerciales de “taurinos” y virtuosas figuras, que quieren hacer o han hecho ya, una fiesta a su antojo.-
Fermín González.-